miércoles, 13 de enero de 2010

El arzobispo de Puerto Príncipe, entre las víctimas del terremoto

El cadáver de monseñor Serge Miot apareció entre los restos del arzobispado
El arzobispo de Puerto Príncipe, monseñor Serge Miot, se encuentra entre las víctimas mortales del terremoto de 7,3 grados en la escala de Richter que ha arrasado la capital de Haití, según informó la agencia misionera de noticias MISNA.

El cadáver de Serge Miot apareció entre los restos del arzobispado, que se ha hundido a causa del seísmo, según informaron a MISNA los misioneros de la Sociedad de Saint Jacques, presentes en Haití desde hace más de 40 años. Aparte, no hay noticias sobre la suerte que ha podido correr el vicario general, monseñor Benoit.

También Brasil está de luto, porque además de los cuatro cascos azules de ese país que han muerto entre los escombros del edificio de la ONU, el terremoto ha acabado con la vida de la médico Zilda Arns, una de las figuras más importantes en la asistencia social brasileña, informa Verónica Goyzueta desde Sao Paulo. Fundadora de la Pastoral del Niño, vinculada a la Iglesia Católica, el trabajo de Zilda benefició a más de dos millones de niños en el país.

Zilda era hermana de Don Paulo Evaristo Arns, arzobispo emérito de São Paulo. Según el canciller Celso Amorim, el presidente Lula lamenta profundamente esta pérdida.

La reputada misionera brasileña Zilda Arns Neumman, fundadora y coordinadora de la Pastoral de la Infancia, caminaba por la calle en Puerto Príncipe en compañía de dos soldados brasileños en el momento en el que ha comenzado el terremoto.

Arns ha fallecido golpeada por algún objeto, según ha confirmado el jefe de gabinete de la presidencia de la República, Gilberto Carvalho.

Tenía 75 años, era médica pediatra de profesión y había viajado al país caribeño el pasado fin de semana para un encuentro misionero en el que se discutirían métodos de combatir la desnutrición infantil. Estaba alojada en la sede episcopal de Puerto Príncipe.

La Pastoral de la Infancia fue creada por el Episcopado brasileño en 1983 como un órgano de atención a menores de hasta seis años de edad de comunidades pobres, para promover el desarrollo integral de los niños. La fundadora de la agrupación recibió numerosos premios por su labor social, entre ellos el premio de derechos humanos de las Naciones Unidas, concedido en 2002.

No hay comentarios: